Carta agridulce

Me siento un poco triste y abrumada con lo que ha pasado estos meses,

de subidas y bajadas,

de ésta montaña rusa.

Me siento un poco triste y decepcionada, no de ti.

De mí.

Por permitir que me hagan daño y no saberme dar mi lugar,

por tener baja autoestima,

por haberme comparado,

por sentirme insegura,

por no amarme lo suficiente.

En el tiempo de haber vuelto han habido cosas muy bonitas entre los dos.

Hemos reído juntos,

llorado juntos.

Siento una alegría empañada en mi alma; por un lado feliz de que avances y llegues a donde hoy estás.

Por otro lado porque te vas y tengo tantas preguntas en mi mente a cerca de los dos,

de ésta relación.

Hoy más que nunca siento duda.

Quisiera tener certeza, pero han pasado tantas cosas y nos hemos herido tanto que no logro entender siquiera de qué estamos hechos.

Éste tiempo que te vas creo que ambos vamos a saber a dónde vamos y si queremos ir juntos. A pesar de todo eres el hombre más especial con el que he estado,

el mas cariñoso y comprensivo.

El más atento

y sobre todo el que más ha luchado por mi amor de forma libre, sin ataduras.

Quiero decirte que te lo has ganado hace mucho;

mi amor y respeto hacia ti y todo el conjunto de cualidades y defectos que tienes.

Te amo por lo que eres. Siempre, pero siempre te voy a amar.

Estemos o no juntos.

Te deseo muchos éxitos, y fuerza para lograr todo lo que anhelas.

Te admiro demasiado.

Te amo demasiado.